Cuando empecé a trabajar tenía 18 años; estaba encargada de la logística del equipo de carreras de mi papá. Empecé a notar que cada fin de semana de carrera me empezaba un dolor en el nervio ciático.

 

Un día mi mamá me leyó un extracto de un libro que decía:

 

¨dolor en nervio ciático, relacionado con la sensación imaginaria de estar cargando más responsabilidades de las que se tiene la capacidad de manejar¨ Algo así, como cargar una caja muy pesada, aún cuando sea imaginaria.¨

 

Es ese mismo momento me dije ¨si es mucha responsabilidad, me gusta lo que hago, elijo hacerlo, estoy bien¨. Y se los juro, ¡desapareció el dolor!

 

Ahí empezó mi camino relacionando las emociones con las manifestaciones del cuerpo. Toda enfermedad, o alergia, la relaciono con un factor emocional que se dispara con un factor externo.

 

Existen teorías que relacionan la gastritis con la sensación ¨de no poder digerir una situación, sentirse atrapada o de algo que le imponen¨. La constipación con ¨la dificultad dejar ir lo que ya no necesita¨. El asma con la sensación de ¨este amor me sofoca¨. Y así podría continuar.

 

¿Les ha pasado que si andan tristes, se resfrían o se resfrían sus hijos? ¿O les ha pasado que se sienten abrumadas y les empieza a doler la cabeza o se les inflama el estómago, y sus hijos son menos amables en la escuela?

 

Incluso LAURA GUTMAN; hablando de recién nacidos y postpartos, asegura que la pregunta, ¿porqué llora mi bebé? Se responde con esta otra pregunta, ¿porqué llora la madre?

 

El bebé expresa especialmente todo el material emocional que las madres no registramos, que hemos relegado a la sombra. Es decir, manifiesta justo eso en lo que hemos puesto tanto empeño en olvidar: situaciones confusas de la infancia, secretos, abandonos emocionales, pérdidas afectivas o dolores sin nombre.

Por eso, cada vez que el bebé llora, además de acunarlo, abrazarlo, alimentarlo, protegerlo, tomemos contacto con eso que nos duele, pidamos ayuda, conversemos con las personas más cercanas afectivamente sobre eso que nos pasa o que nos pasó. Asumamos nuestros conflictos y busquemos la manera de encararlos con mayor madurez.

 

Mi teoría es que todo está conectado, estamos conectados.

 

Los doctores le llamarían ¨stress¨. Pero hay tanto detrás del stress, ocupamos ampliar nuestro vocabulario emocional. El stress no se cura con una pastilla, solo lo pone en MUTE, para que tenga que manifestarse con un síntoma más agresivo.

 

Los psicólogos le llaman ¨somatizar¨.

 

¨Cuando las emociones no pueden ser expresadas, son somatizadas. Dicho de otro modo, el conflicto psicológico a veces se transfiere al cuerpo para que sea resuelto sin sufrimiento psíquico. A las personas se les hace complicado aceptar que es nuestra mente la que genera esa alteración.¨ Mairena Vásquez

 

 

INFORMACION GENERAL

 

Pues les cuento todo esto a manera de introducción, porque cuando Nico nació, gran porcentaje de sus amiguitos bebés, fueron diagnosticados APLV (alergia a la proteína de la leche de la vaca). Las mamás que vivieron ese proceso, vivieron momentos de angustia extrema tanto por sus hijos, como por ellas, por mínimo el primer año de vida de sus bebés.

 

Muchos niños superaron sus reacciones al año, otros no.

 

Bebés con reacciones en piel, llantos incesantes, sangre en heces, diarrea, vómitos. Mamás con una alimentación llena de restricciones, bajando de peso cada día más, para sostener su lactancia.

 

La proteína de la leche de la vaca, se llama caseína y se pasa a los bebés por medio de la leche materna. A través de la lactancia, si la mamá consume lácteos o productos con caseína, el bebé la absorbe y hace la reacción alérgica.

 

También puede pasar que el sistema inmaduro del bebé, no reconoce diferentes tipos de proteína, entonces, si la mamá come un huevo, un pescado, o hasta carne o pollo, los bebés también podrían reaccionar. Cuando hay reacciones, todo el cuerpo se sensibiliza y podría haber reacciones a alérgenos como las semillas y soya.

 

Hace 4 años como espectadora, juré que ¡todo eso era un martirio! Hasta llegué a pensar ¡eso le pasa a las mamás estresadas! ¡y sus bebés somatizaban sus emociones!

 

 

LINA HIZO REACCION

 

Desde que Nico nació tomé consciencia de los efectos de comer lácteos, y por salud, en casa lo consumimos a lo mínimo.

 

Un mes antes que Lina naciera empecé a comer todavía menos, y durante los primeros 2 meses de vida de Lina, tampoco comí, ¡hasta que un día me antojé de un McFlurry de McDonalds! ¡y juaz! Lina sangró en heces. Eso es una señal de reacción alérgica a la caseína.

 

¿Y entonces era yo la mamá estresada? ¿Dónde me meto yo todas mis teorías anteriormente mencionadas? ¿Donde?

 

 

¡Y EMPECE!

Mi nivel de paz, de conexión, de introspección, estaba en 10. ¡Tanque lleno! Mis postpartos son retiros espirituales para mi, porque el tiempo se detiene y puedo hacer sólo una cosa ¡ser mamá! Pero como en todo retiro espiritual, uno cree que se inscribió para ¨algo¨ y la enseñanza ¡te sorprende!

PRIMERA FASE NEGACION

 

En mi caso, no me negué al hecho que realmente Lina estaba haciendo una reacción alérgica, me negué a vivir el proceso como si fuera un martirio, un sacrificio, una tortura. ¡Algo de bello tenía que tener esa sangre en el pañal!

 

Me negué a limitar mi alimentación a arroz, o galletas de arroz.

 

Me negué a perder de peso abruptamente con dietas desbalanceadas nutricionalmente, en nombre del amor que le tengo a Lina.

 

La dieta de restricción que hacen las mamás en lactancia con bebés APLV le llaman ¨dieta del amor¨. Cuando digo dieta me refiero a la definición de diccionario ¨conjunto de alimentos consumidos por un individuo¨, no me refiero al nuevo concepto de dieta como método para bajar de peso.

 

Se le dice ¨dieta del amor¨, porque sólo por amor uno comería con tantas restricciones. Yo le llamé a esa dieta, ¨dieta de amor propio¨. Porque cuando digo restricciones me refiero a la bella idea de comer sin;

 

  • Alérgenos (huevo, semillas, lácteos, soya, mariscos)
  • Sin colorantes
  • Sin preservantes
  • Sin aditivos

 

Osea, ¡comer saludable! Y para mi comer saludable, tiene que ver con el amor propio, más que el amor que le tengo a Lina.

 

Tengo 8 meses de comer la comida más sabrosa de mi vida, y sentirme más viva que nunca. También como supe que posiblemente no volvería a comer tan tan tan saludable, ¡me propuse tonificar aún más mi cuerpo! ¡y me siento como de 15años!

 

Peso lo mismo que pesaba antes de quedar embarazada de Lina, pero me veo como si tuviera 10k menos. Porque mi cuerpo se desinflamó completamente. ¡Es como un detox!

 

SEGUNDA FASE ENOJO

 

Si algo tengo claro, es que el hecho que Lina hiciera ese tipo de reacciones tenía un factor emocional, disparado con un factor externo. El externo era la caseína. ¿Pero el emocional? ¿Osea, cómo se le ocurrió a Lina semejante atrevimiento?

 

Primera parada; cita con mi psicóloga María Isabel Azqueta. Revisamos mi historia.

 

Como ya les he contado la infancia de mi madre, estuvo carente de cuidados maternos. Entonces mi mamá aprendió a no enfermarse. Así como lo oyen. Luego, cuando yo era niña, mami minimizaba mis enfermedades a ¡eso es nada! Y todo lo curaba con té de manzanilla. Entonces, de verdad, ¡yo casi no me enfermo!

 

Existía una creencia que enfermar ¡era de débiles!

 

Y llega Lina, ¡y se atrevió a enfermarse! ¡se atrevió a reaccionar! ¡se atrevió a sangrar!

 

En esa sesión hice las paces, con la fortaleza que se encuentra en la vulnerabilidad. Una fortaleza que no conocía. Una fortaleza que reconoce que se es amada, valiosa y segura, aún cuando enfermes.

 

María Isabel que me ama me dijo ¨haz hecho un buen trabajo, le diste permiso a tus hijos de atreverse a enfermarse¨

 

TERCERA FASE NEGOCIACION

 

Talvez, sólo talvez, si yo sano, Lina no necesite ser TAN atrevida.

 

Tercera parada; fui a Terapia de Biodescodificación con la doctora Patricia Monge.

 

Se las resumo, la Biodescodificación es;

 

¨el arte de acompañar a la persona a encontrar la emoción oculta, asociada a un síntoma para descodificarla y así favorecer la curación mediante la liberación de la emoción que hay en el inconsciente¨ Enric Corbera

 

Pues ella me explicó que la proteína de la leche, si la vemos en un microscopio, es el elemento que le da la estructura. Me pregunto ¿qué te molesta de la estructura de tu madre? Juaz!

 

He sanado mucho, me falta otro tanto.

 

Le expliqué; me molesta que parece que no tiene estructura, pero tiene una muy firme.

 

Me pregunto ¿qué lácteos me gustaban y cuales no? Le expliqué que me gusta la leche condensada, y los helados, pero que me dan diarrea. Me gusta la natilla y el queso crema, y esos me caen bien… ella me escuchaba hasta que me dijo ¨Quieres a tu mamá cerca, pero no tanto. La quieres lejos, pero no tanto¨.

 

¡Otro, juaz!

 

Entramos a la sesión, ella mediante la respiración y visualización, me acompañó a una escena. Que puede ser ficción o realidad, pero que lo más relevante es la creencia que libera. En esa visualización fui a un recuerdo a mi madre, si, yo recordando temas de mi madre. En el que ella a sus 4 años creyó ¨soy poco¨.

 

La leche, a lo largo de la historia, representa ¨la madre¨, la relación con la madre. Una vez más, sólo que esta vez, en una grada más arriba, sané mi relación con mi madre.

 

Cada vez mis reacciones hacia mi propia madre, son menos alérgicas. (Un chistecito alérgico)

 

TERCERA FASE. DEPRESION

 

Estoy usando las fases del duelo, para narrarles mi duelo.

 

En esta fase, no había tristeza, pero si resignación. Ahora la veo como una buena señal.

 

En esta fase, sólo empecé a buscar formas de que las reacciones de Lina no fueran tan fuertes, entonces:

 

  • Usé probióticos
  • Usé aceites esenciales
  • Lina fue a terapia con el osteópata
  • Fui a 3 homeópatas, el tercero, para mi ¡fue el indicado!

 

Cuando empezó a comer sólidos, hizo reacción al pollo que compre en el supermercado. ¡No lo podía creer! Entonces me di a la búsqueda de un pollo orgánico, y ¿adivinen? No hizo reacción.

 

Esa resignación me invitó a ser todavía más exigente con los productos que compraba. Porque me di cuenta que no sólo era un tema de ¨alérgenos¨, sino también de procesos químicos en la industria alimenticia.

 

CUARTA FASE. ACEPTACION

 

Llevé a Lina a sus vacunas de los 4 meses, cuando tenía 6 meses. Con esas vacunas hizo la reacción más fuerte de su corta vida, el pañal era como una toalla con menstruación.

 

¡Me enoje! ¡Me enoje! Pero creo que no era enojo, era ¡empoderamiento!

 

Ok, Lina hacia reacciones alérgicas, pero si las iba a hacer, las haría porque me comí un granizado, no por unas vacunas.

 

¡Y me comí una lata de leche condensada! Y no reaccionó.

 

¡Y me comí unos pancakes con leche! Y no reaccionó.

 

¡Y me comí una lasagna! Y no reaccionó.

 

¡Y me comí una tostada con queso en la mañana y un sándwich prensado con queso por las tardes, por una semana! Y no reaccionó.

 

¡Y entonces hice prueba de sangre en heces! NEGATIVO.

 

No sé si fue la primera cita, biodescodificación, el osteópata, los aceites, la homeopatía, su madurez intestinal a los 9meses o el empoderamiento de su madre, ¡pero Lina no reacciona a la caseína ni a otros alérgenos!

 

 

 

NO ME CUENTES EL SINTOMA, CUENTAME EL SENTIMIENTO

 

Lo que más me interesa de compartir mi testimonio, no es que Lina no haga reacción. Sino, el proceso. De revisar, preguntarme, sanarme, seguir sanando, liberar a Lina y amarla atrevida. 

 

En este post, acerca de ¨Honrar el proceso¨, les conté de ¨mis maestros¨, les mencioné que hay maestros que merecen posts aparte, este post honra la salud-enfermedad, como eso, ¡una maestra!

 

¿Cómo se relacionan ustedes con su cuerpo? ¿Cómo si fuera un edificio que ustedes alquilan? ¿Cómo te sientes cuando enfermas? ¿Débil, vulnerable? Porque no estas acostumbrada a que te cuiden. O ¿amada y consentida? Porque cuando enfermas logras cuidados y atenciones. ¿O conectas inmediatamente con tu mente y alma? Haces una pausa, y preguntas ¿qué me está diciendo el cuerpo? ¿que necesita mi alma? Pides cuidados necesarios, pero te maternas como adulta.

 

¿Y cómo te sientes cuando alguien se enferma? ¿Te identificas, te da pena, te da cólera, te da igual?

 

Revisemos ¿cuáles son las alergias del corazón? Revisemos qué emociones nos cuesta digerir, sintamos que situaciones nos congestiona la vida.

 

Lina no es sus reacciones, yo no la amo más ni menos por la forma en que su cuerpo se manifiesta.

 

Al inicio escibrí ¡algo de bello tenía que tener esa sangre en el pañal!. Hoy veo belleza en el proceso completo.

 

Hoy no soy la misma, hoy no satanizo las alergias, y tampoco le prendo velas a los lácteos. Hoy hago ¨la dieta al amor propio¨ por convicción, hoy celebro la capacidad de nuestros cuerpos de manifestar desde emociones, patrones hasta procesos químicos del sector alimenticio. ¡Hoy celebro todo!

 

La conexión mente, alma, cuerpo, puede sanarnos o atraparnos.

 

Para más info;

 

  • Documental en Netflix ROTTEN; Peanuts
  • Documental en Netflix WHATAHEALTH
  • Documental en Netflix. THE BUSINESS OF BEING BORN
  • Emociones Que Matan de Don Colbert
  • Sana tu cuerpo: Las causas mentales de la enfermedad física y las formas metafísicas de superarlas de Louise Hay
  • La maternidad y el encuentro con la propia sombrade Laura Gutman